¿POR QUÉ REALIZAR TREKKING EN LA SELVA TROPICAL COLOMBIANA?

Colombia es una fuerza potencial de la biodiversidad, es un pueblo que se levanta y se acuesta cada día bajo la luz del mismo sol.

Durante varios viajes que he realizado,recorriendo el territorio Colombiano, he escuchado en repetidas ocasiones que nos podemos ver en el café que tomamos cada mañana, en el cacao, el maíz, en la cordillera, en los volcanes, en los mares que nos bañan de sur a norte, en nuestra mezcla cultural, en la música, la alegría, el tesón y sobre todo, en el sol.

Además, he logrado ver en los ojos y las sonrisas de las personas cada amanecer y cada atardecer, pues hemos nacido bajo el mismo sol y bajo el mismo cielo; que la luz nos cubre casi al mismo tiempo en cada departamento de Colombia; que mientras en el sur se esconde tras la poderosa Cordillera de los Andes, también lo están viendo refugiarse en el Pacífico, que baña las costas.

En la montaña, la playa, el mar, la ciudad, o incluso bajo la lluvia, es el mismo sol que nos guía, símbolo de la fuerza, de la luz y el poder que era el sol para los nativos, y que podemos seguir tomando como guía para lograr conocer todos los lugares maravillosos que existen.

¡Somos Hijos Del Mismo Sol!

San Cipriano es un lugar que incita a desarrollar la creatividad, a pensar en nuevos proyectos, a alejarnos de las tecnologías y dedicarse nada más y nada menos que a uno mismo y a la compañía, ideal para un buen senderismo Tropical. 

Llegue hasta Córdoba y me desplace hasta el pueblo por medio de la famosa “brujita”, el medio de transporte más curioso que he visto, encima de unas vías férreas, una tabla de madera y una moto encima.

Nada más a la entrada se escucha el género de música salsa en las casas y barcitos, los niños juegan al fútbol y corren en las calles descalzos como si no hubiera mañana. Un clima agradable y agua pura por todas partes. Aquí reinan las cascadas y saltar al agua es la mayor de las diversiones, nadar y dejarse llevar por la corriente es el pan de cada día. Es el lugar perfecto para renacer.

Los senderos son apropiados para perderse y encontrarse en los diferentes charcos. Camino hasta llegar al Charco Oscuro y buscar los trampolines espontáneos de la naturaleza creativa, la cascada de los sábalos y el charco de la balastrera. Por el sendero del amor encontrarás varios refugios, y ninguno de ellos incita a hacer la guerra.

Una comunidad afro en plena selva tropical, en la que la iluminación nocturna es cosa de las estrellas. Una mesa, música del pacifico y buena conversación a orillas del río. Un verde interminable que se mezcla con los colores tierra, vivos cuando irradia el sol, intensos y bravos cuando llueve. Un paisaje que no deja indiferente a nadie y atrapa tanto como quieras. Imposible resistirse.
Colombia de contrastes, conseguiste sorprenderme una vez más.

Madrugar desde la ciudad de Pereira, cruzar la cordillera, descender al valle del San Juan, sentir el calor, sudar, comer chontaduro, tomar borojó, encontrarse con nativos del territorio, escuchar las charlas, cruzar el San Juan, acampar a la orilla del río, observar aves, tomar un baño en el río y cruzarse con su riqueza de anfibios es algo mágico. El bosque húmedo tropical de esta zona cuenta con una amplia vegetación, es fascinante ver en el bosque esta gran variedad de adornos y plantas epifitas.

Nadar en el río Amurrupá, descansar y cocinar en su orilla, disfrutar la comida, ver la fauna y los increíbles anfibios. La Oophaga, es una de las ranitas venenosas de Santa Cecilia, verla por primera vez, contemplarla, en muchas ocasiones, disfrutar su presencia y escuchar sobre la procedencia de su veneno.