1. Gafas de natación con puente fijo o monobloque
Estos modelos son los más limitados pues vienen preestablecidos, por lo que es probable que se adapten o no a tu rostro y tu nariz. La principal ventaja del puente fijo es que una vez encuentres las gafas que se adaptan a tu cara, nunca se te van a desajustar.
Si tu nariz no es muy pronunciada ni demasiado ancha, este tipo de puente puede funcionarte muy bien. Muchos nadadores las prefieren porque aportan comodidad ya que tiene un puente de silicona en vez de plástico rígido. Lo puedes encontrar de silicona o de plástico más duro, según el material de la montura de la gafa.